Había escuchado la teoría de que cuando se ponen botellas llenas de agua afuera de una casa, se evita que los perros orinen el sitio, pero esto si es una majadería.
La fotografía es incompleta, pues la casa tiene mucho más botellas a lo largo de su extensión, no se ustedes pero yo nomás de puro coraje me voy a ir a orinar ahí.
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No soy crítico de música, mucho menos de cine, literatura, etc. no soy una persona que crea que tiene la razón siempre y que se aferre a lo que cree sin antes haberlo analizado, tampoco soy una persona que busca sacar todas sus frustraciones o traumas subiéndolas a la red para que estén al alcance de los millones de usuarios con los que cuenta la red, simplemente soy alguien que necesita un espacio para expresar sus ideas y este es fácil de usar y gratuito.
Hace algunos días me llegó el tan esperadísimo DVD de mi banda favorita “Muse”, y sólo confirmó lo que había llegado a pensar de ellos durante los casi 3 años que llevan en su gira promocionando su más reciente producción “Black Holes and Revelations”: A veces no es lo mejor madurar tan rápido. ¿A qué quiero llegar con mi expresión anterior?, a algo muy sencillo, ¡el trío inglés es una fregonería en vivo!, no por nada les dieron el NME a mejor acto en vivo, de eso estoy más que convencido, vivir un concierto de ellos es una experiencia única, inigualable, algo mejor que comer mango (y nótese que comer mango es mejor que un orgasmo) jajaja, bueno creo que no es para tanto pero son muy buenos. Una de las cosas que más me atrajo de Muse fue su potencia en el escenario, su capacidad para improvisar, pues es de las pocas bandas que es muy diferente escucharlas en el disco que escucharlas en vivo, su actitud capaz de destruir el lugar donde tocan sin dejar de ser un grupo “refinado”, su creatividad para transportar canciones que a veces constan de 4, 5, 6 instrumentos a tan sólo 3, ese era el Muse que me impactaba, ese era el grupo del cual terminé traumado al grado de ponerlos a sonar casi las 24 horas del día en mis oídos.
Si bien sabemos que el último disco en estudio ha sido el más logrado de la banda, también estamos conscientes de que es el culpable de que hasta el vecino reggaetonero y académico tv azteca los conozca (lo cual a mi me vale pito, a mi me seguirán gustando así les gusten hasta a los que escuchan a Belinda, pues me interesan mis gustos no los de ellos), pero la parte contraproducente de esto es que al ser más comerciales obviamente deben de quedar mejor con las disqueras, lo cual significa quedar mejor con la gente a la que le gusta su trabajo que los catapultó a la fama más que sus obras anteriores (si es que el populacho las conoce, pues sabemos que la mayoría de la gente disfruta solo de las canciones populares), por lo tanto a la masa no le gusta experimentar algo diferente, le gusta estar en lo mismo, le gusta que un grupo suene igual que en la canción que pasaron en alfa, pues no están preparados para ver a un verdadero acto en vivo. Y así nace la actual gira de Muse, las canciones son las magníficas melodías a las que Matthew Bellamy, Chris Wolstenholme y Dominic Howard nos tienen acostumbrados, aunque estoy un poco en desacuerdo en el hecho de que en todo el tour hayan tocado casi por completo su último disco (algo que en ninguna de sus giras pasadas habían hecho) dejando fuera canciones como Bliss, Muscle Museum, Toughts of a Dying Atheist, Citizen Erased (las dos primeras aparecieron muy rara vez, las segundas dos nunca tuvieron lugar y la última la dejaban de tocar por un lapso prolongado de tiempo, volvía y cuando menos te lo esperabas desaparecía de nuevo). El escenario que usaron era impresionante, muy a la altura del utilizado por U2 o The Rolling Stones, visualmente mejoraron muchísimo (más ventas de disco, más varo para la gira), una cosa que me causa conflicto es la inclusión de Morgan Nichols en su alineación en vivo, al elaborar música más compleja para el material discográfico ya no podían ser solo 3 en el escenario y tuvieron que recurrir a un músico extra para sus presentaciones, cosa muy comprensible debido a que no podían tocar 2 instrumentos por integrante al mismo tiempo, así que usaron a Nichols para ejecutar los temas del último disco; lo que me saca de onda es ver como Morgan también se dedica a tocar canciones de épocas pasadas mientras Matthew Bellamy aplaude para animar a la gente o hace ruidos con la guitarra que carecen de relevancia solo para acompañar un piano que bien pudo tocar él o transportarlo a la guitarra como solía hacerlo (véase Butterflies and Hurricanes y Sing for Absolution). Por otro lado vemos que las improvisaciones a las que nos tenían acostumbrados poco a poco van desapareciendo para dar paso a interpretaciones más apegadas a las grabadas en los discos. Una de las cosas que más me enoja es que culminen sus conciertos con Take a Bow, pues me encantaba que la última fuera Stockholm Syndrome y terminaran haciendo riffs y destruyendo el escenario, Take a Bow es una canción que no se presta para terminar poderosamente y que solo deja a 3 personas en un silencio total diciendo “Gracias”.
Como conclusión puedo argumentar que el HAARP DVD es un video que nos muestra a un Muse maduro, serio y en un papel de banda gigantesca (con lo cual estoy de acuerdo aunque me pongo a pensar y digo ¡Tienen 28 años más o menos, es muy pronto para que una banda madure y deje de hacer las excentricidades que tanto nos gustaban a los fans!, Visualmente es una cosa sin comparación, es un deleite para la pupila, un espectáculo comparable con el POP de U2, el Pulse de Pink Floyd, el Playing the Angel de Depeche Mode, pero musicalmente a mí como fan me decepcionó un poco, pues para empezar en cuanto a Setlist había mejores en esta gira y las que realmente nos merecíamos los seguidores se quedaron fuera del DVD (Microcuts, Bliss, Citizen Erased), mismo que califico de grandioso por ser Muse y por ver todo lo que han logrado, aunque si tuviera que elegir entre actos en vivo de la banda prefiero el Absolution Tour o el Hullabaloo, pues es más apegado a lo que el monumental Muse solía entregarnos. Gracias por su tiempo.
